Tuvimos la oportunidad de asistir al 130 aniversario de una de las empresas más aclamadas en el mundo de los espirituosos: el ron Flor de Caña. La cita fue nada más y nada menos que en el bar Fifty Mils, el cual se encuentra en el patio central del hotel Four Seasons. Fue toda una velada llena de elegancia, glamour y gollería.
Al llegar, nos admiramos ante la belleza que deslumbra el jardín a la luz de la luna. Una arquitectura gallarda y de armonía geométrica es la entrada perfecta al bar. Nos recibieron con una copa de Flor de Caña 18 años para empezar. Siguiendo el corredor se distinguía una barra llena de quesos de todo tipo: brie, gouda, manchego, etc. además de uvas y pan de campiña para acompañar, así como también fiambres, pequeños cocteles de mariscos, un jugoso corte de prime rib y, por supuesto que no podía faltar, una buena pierna de jabugo; el cual se ofrecía como acompañante perfecto para degustar nuestra copa 18 años.
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Llegamos a la barra, reconocida por ecléctica e innovadora, en donde nos tenían preparados unos drinks dedicados al evento, acentuando una coctelería elegante y minimalista muy ad hoc a la marca con rones de 12 y 18 años. Además de degustar el brebaje en las rocas lo pudimos hacer en un cóctel especial, 12 Colada by Fifty Mils: una deliciosa versión de piña colada que destacaba los perfiles de miel y nueces tostadas del destilado de 12 años.
Por supuesto, la marca nos tenía una sorpresa a todos los invitados. Eduardo Pelles, representante de la quinta generación a cargo de la empresa, nos contó brevemente la historia familiar. Un comienzo incierto de un italiano aventurero que derivó en éxito. Muy orgullosos de seguir manteniendo la tradición después de 130 años, Eduardo junto con Mauricio Solórzano, embajador global de la marca, revelaron del escenario la botella Flor de Caña 30 años ofreciendo a cada uno de los invitados una degustación.
Fotografía cortesía Agencia Trama
Sostenible y natural
Tuvimos la oportunidad de platicar con Mauricio, una persona fogosa por su trabajo y contento de estar en México. Nos recalcó que Flor de Caña es una empresa de Nicaragua, ubicada en las faldas del volcán San Cristóbal, 100% sostenible y natural. Natural, reafirmando que el espirituoso no lleva aditivos de ninguna índole, el aroma, sabor y color son 100% naturales así como su añejamiento en barricas de bourbon, las cuales aportan el perfil ahumado y maderoso, aunque diferente en cada versión. Sostenible –esta fue nuestra parte favorita–, ya que es una empresa con energía totalmente renovable. Flor de Caña es pionera en este tema, tienen más de 20 años creando su propia energía a partir de la biomasa de la caña de azúcar (bagazo), de modo que se utilizan todas y cada una de las propiedades de su materia prima.
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Mauricio Solórzano, embajador global de la marca.
El ADN de Flor de Caña es innegable, desde sus mecanismos ambientalmente responsables hasta su preocupación y ocupación por sus miles de trabajadores, sus certificaciones como KOSHER y Fair Trade, nos traen desde el campo hasta nuestra copa un legado de una familia que apostó por todo y lo ha conseguido, ¿la prueba? un destilado con añejamiento de 30 años que nos evoca aromas a vainilla, caramelo y madera. “Esto es poner la barra en alto”, afirma Mauricio
¿Qué sigue?
Algo que Flor de Caña entiende con seguridad es que sus clientes y consumidores son los que pondrán la pauta para el siguiente paso, siempre exigiendo más de esta empresa nicaragüense orgullosa de sus orígenes.
Para conocer más sobre esta empresa visita:
https://www.flordecana.com/
FB: Flor de Caña
IG: flordecana_es
Para conocer más sobre Fifty Mils visita:
https://www.fiftymils.com/bar-fifty-mils-sp.html
IG: fiftymils
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