Para obtener un whiskey de calidad, se necesita atención al detalle, pasión, tradición y un toque artesanal; elementos que se ven reflejados en cada uno de los procesos que se siguen a lo largo de su elaboración. Jack Daniel’s sabe esto y es por eso que desde 1866 produce un whiskey en Tennessee que ha sido galardonado en países como Estado Unidos, Bélgica, Inglaterra y Holanda.
Durante la fabricación del famoso destilado, se siguen cuatro procesos únicos que lo diferencian del resto:
1. Sólo utiliza agua de manantial.
Desde hace 150 años, esta destilería edificada en Lynchbourg, sólo utiliza agua de manantial o “cave spring water” para elaborar su whiskey. ¿La razón? Carece de hierro y es filtrada a través de piedra caliza, lo que le aporta múltiples minerales que contribuyen al carácter final de la bebida.
2. Elabora sus propias barricas.
Al ser considerado como un ingrediente más -que conforma el distintivo sabor y color ámbar del destilado- y no como un simple contenedor; la firma le ha apostado a la fabricación, desde cero, de sus propias barricas de roble americano quemadas por dentro.
3. Es filtrado por carbón de maple.
Este proceso de filtrado, conocido como “la bendición extra”, es un método implementado por Mr. Jack Daniel desde la fundación de su destilería hasta el día de hoy y consiste en pasar la mezcla, gota a gota, a través de tres metros de carbón de maple, resultando en la distintiva suavidad de la bebida.
4. “Está listo cuando está listo”.
Los maestros destiladores de Jack Daniel’s confían totalmente en su experiencia y saben que el whiskey “está listo, cuando está listo”. Así es como cada uno de los barriles se somete a un proceso de cata, para decidir si la bebida está o no lo suficientemente madura para ser una digna representante de este Tennessee whiskey.
En esta ocasión, Jack Daniel’s presenta Gentleman Jack Rare Tennessee Whiskey, el único whiskey de la familia, que pasa por un proceso doble de filtrado por carbón de maple, lo que produce una excepcional suavidad y balanceados sabores de vainilla y caramelo, enriquecidos con el ahumado proveniente de las barricas de roble americano, que hacen de ésta una bebida única y especial, ideal para disfrutar entre auténticos caballeros.
NOTAS DE CATA
En nariz: limpio; a vainilla y caramelo.
En boca: tibio, de fin corto. Se suaviza el roble, consecuencia del segundo filtro.
¿Cómo beberlo? La mayoría lo toma puro; sin embargo, un toque de cítricos también le va de maravilla.
¡Así es como Jack Daniel’s comprueba día a día que nació para hacer whiskey!
Por: Karen Villagómez
Fotografías cortesía
