En este breve encierro algunos ya hemos hecho de todo: clases en línea, poner al corriente pendientes, arreglar la casa, jugar con las mascotas, sacar los juegos de mesa, hacer sesiones para ejercitarnos, preparar mil y un recetas, leer uno o varios libros, un maratón de series o películas… en fin, la lista no acaba. Sin embargo, a todos nos llega un momento en que lo único que queremos es dejar de pensar en la ansiedad que esta situación ocasiona y por ello te traemos una excelente solución.

¿Consumir helado es bueno?

El simple hecho de comerlo nos mejora el ánimo, ya que derivado del no poder salir de casa por largo tiempo, se han presentado casos de ansiedad e incluso depresión. Según Vicente Guerrero, director de la Unidad de Ganadería de MSD Salud Animal México, “Los helados contienen una gran cantidad de triptófano, un aminoácido que calma y reduce la agresividad. Además, contribuye a la producción de serotonina -también conocida como la hormona de la felicidad-, una hormona que da el sentido de bienestar, felicidad, nos relaja, combate el estrés y ayuda a dormir mejor”.

Este aminoácido se encuentra principalmente en alimentos de origen animal como: pavo, pollo, leche, queso, pescado, huevos y de origen vegetal tales como tofu, soja, semillas de ajonjolí y de calabaza, nueces, maní y mantequilla de maní. Así que para contar con este nutriente los helados a los que nos referimos deberán ser a base de leche o crema, pues estas cuentan con proteínas, lípidos, azúcares, calcio y vitamina B2.

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La proteína animal que contienen, en este caso proveniente de la leche, es la encargada de dar tanto el sabor, la consistencia, la cremosidad y sobre todo, los nutrientes que favorecen la salud ósea (calcio), el crecimiento y la producción de glóbulos rojos (Vitamina B2).
No obstante, no debemos perder de vista que el consumo en exceso de este producto puede ser dañino. Así que para evitar afectar la salud, debemos consumirlo dentro de una dieta moderada, pues aunque juega un papel importante en la alimentación solo se puede consumir como un complemento en una dieta saludable gracias a su gran cantidad de nutrientes.

Perfecto para el calor

Por otro lado en cualquier presentación o sabor llegan como una excelente opción para refrescarnos en esta temporada de calor. De hecho, entre los mexicanos este postre incrementa su consumo en un 48 por ciento en primavera con respecto al resto del año, según datos de la Secretaría de Economía en un análisis del sector lácteo en México. Un dato que además nos llama la atención es que el 69 por ciento de los hogares compran algún tipo de postres fríos, como helados, paletas o congeladas, es decir, 7 de cada 10 familias mexicanas destinan aproximadamente el 4 por ciento del gasto anual en estos productos.

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Pensemos en este postre además como un tipo de recompensa: quizás al terminar una jornada de home office o las tareas diarias en casa, una porción de helado no nos caerá nada mal. Te dejamos esta infografía que nos proporciona MSD Salud Animal en México, con algunos datos interesantes sobre este producto:

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