Ahora que se aparecen cada día más las tardes soleadas y de buen calor, te presentamos una excelente opción para vivir una experiencia gastronómica de platillos regios y mixología refrescante. La Buena Barra, ubicada en Masaryk Polanco, se ha posicionado como uno de los mejores spots para ir a agasajarse con cortes de carne jugosos y platillos de sabores a parrilla, humo y carbón.

Concepto oriundo de Monterrey, con presencia en Cancún y la Ciudad de México, ha cautivado a corazones carnívoros. El ambiente, es único pues se encuentra en el tercer piso de un edificio repleto de propuestas gastronómicas. No te equivoques, La Buena Barra es la elección indicada. A siete años desde su apertura y con una terraza espaciosa, nos evocan un concepto distinguido. Ideal para comidas de negocios, cenas en pareja, un viernes con los amigos y hasta una tarde de domingo familiar ya que tienen “mixología para niños” donde su salón privado se convierte en una ludoteca con propuestas para aquellos pequeños curiosos que quieren sumergirse en el arte del buen comer. 

Brebaje tropical 

Es indispensable que te acerques a su propuesta de cantina contemporánea, aquí encontrarás los encantadores carritos de ginebra con diversos ingredientes como frutas frescas, hierbas aromáticas y especias para que elabores el trago de tu predilección. ¡Nunca nos cansamos de ellos! Y en la Buena Barra lo saben, así que han decidido hacer uno de ginebra, de vodka y de ron. 

No obstante, también podrás encontrar una amplia selección de mixología de autor. Tienen desde el inigualable y nunca faltante mezcal jamaica; un trago llamado María Bonita, ganador de concursos que se elabora con chile guajillo, limón y romero para alzar las notas aromáticas. Se sirve en mesa con hielo seco, una visión mística. De igual forma, te recomendamos pedir un Huapango: la pareja perfecta entre tamarindo y chipotle mezclado con un Don Julio 70, escarchado en sal de gusano. La bebida ideal para momentos de calor. O bien, si tienes alma soñadora como nosotros, pide un exquisito trago que lleva por nombre Pink Dragon, una bebida de sabores equilibrados y presentación encantadora; hecho con el extraordinario tequila Casa Dragones blanco sumergido en un mix de jengibre, jamaica, jarabe de piña y una esfera de hielo con sabores distintos dependiendo de la temporada, a nosotros nos tocó un delicioso sabor ácido de maracuyá. ¡Salud!

De tierra y de mar

Pasemos a nuestra parte predilecta: la comida. Para comenzar el agasajo sugerimos empezar con algo ligero, ¿qué tal unas tostaditas de atún?  Atún cien por ciento fresco realizando el dúo dinámico en boca con mango dulce, acompañadas de aguacate y cebolla morada. Una fiesta de texturas y sabores tropicales que siempre se agradece al paladar

Un imperdible es el taco de jaiba de concha suave. ¡Un absoluto deleite! La jaiba (que se come con todo y concha) viene adobada y después frita, encima de una cama de perejil crujiente que se presenta en forma de taco con tres mayonesas distintas. Una de chile serrano con cilantro, otra de chiles secos rojos y la tercera de habanero con aguacate. La recomendación del chef es que revuelvas las mayonesas para echarlas a tu taco y ahora sí, ¡a disfrutar de este manjar del mar tan sencillo y tan lleno de sabor! Si tu apetito es por siempre carnívoro, pide lo tacos de tapa de rib eye con costra de queso y aguacate, aquí no hay equivocación. Asimismo, tienen opciones herbívoras como los tacos Delmonico que vienen con cebolla caramelizada, queso planchado y jocoque sobre tortilla enchipotlada. ¿Te imaginas la combinación de sabores entre dulces, parrillados y picantes? ¡Qué rico!

Los estelares

Aquí la onda se inclina más hacia lo cárnico y jugoso. No te puedes ir sin probar algo del repertorio “de la tierra”. Tienen desde una caña de filete al mezcal en bloque de sal, hasta lechón, cabrito y más. Nosotros pedimos la tapa de rib eye que viene con unos ardientes chiles serranos rojos y unas aromáticas papas trufadas. Este exquisito corte de carne se presenta en mesa sobre una piedra caliente con los chiles toreados listo para servirse si el gusto de término es azul o rojo. Si se quiere medio o pasado de tres cuartos, es cuestión de minutos para llegar a la cocción deseada. ¡La encomienda es comerlo al gusto personal! Puedes pedir el vino de la casa para maridar tu corte; una colaboración con Casa Madero, un blend de tres uvas: Merlot, Cabernet Sauvignon y Shiraz, vino noble y dócil que permite ser dominado ligeramente por la sapidez y suavidad de la carne. 

No olvides que las plantas siempre van bien con la proteína animal, acompaña con una ensalada de espinacas y arúgula. Se sirven con parmigiano reggiano y un aderezo de cilantro fresco. ¡Manjar herbívoro!

Nubes de macadamia 

Para rematar con broche de oro, ordenamos el cheesecake de nuez de macadamia. Un postre de ensueño pues presenta el dulzor exacto sin llegar al empalago. Viene con un dripping de dulce de leche y con macadamias enteras como topping. El acaramelado se apacigua con la cremosidad del pastel y el final crujiente otorgado por cada fruto seco es increíble, recorre todo el paladar viajando por las nubes del placer. 

¿Te convencimos? ¡Haz tu reservación! La Buena Barra se distingue por su excelente cocina y servicio así que lo mejor es que llames y hagas con tiempo tu reservación para no quedar fuera.

¿Dónde?
La Buena Barra
Esq, Aristóteles 124, Polanco IV Secc, Miguel Hidalgo, 11560 Ciudad de México, CDMX
Reservaciones: 55 5280 6699

IG: labuenabarramx
FB: La Buena Barra MX

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