Entrada Morimoto
Entrada Morimoto

Si hay algo que no se puede negar es el éxito, talento y carisma del chef Masaharu Morimoto. Conocido por su participación en Iron Chef America, Morimoto ha sabido cautivar al mundo entero con su sazón gracias a los 9 restaurantes que ha abierto en distintos continentes, y en donde México, no es la excepción.

El restaurante Morimoto llegó a Ciudad de México en el año 2011 para el deleite de muchos, y este 2017, cumple su sexto aniversario entre fiestas y exquisitos platillos. Con este motivo, fui a una de las comidas en donde el sello juguetón del chef quedó plasmado en el menú. ¡Acompáñame a conocerlo!

Cuatro entradas dieron la bienvenida aquella tarde: tuna pizza, saute tako, toro tartare y buri pop. El primero fue una exquisita revelación en cuanto a sabores gracias al alioli de anchoas que se combinaba perfecto con el atún; mientras que el saute tako, cocinado en su punto, hizo un interesante contraste de texturas entre el pulpo y el puré de apio-nabo (que dicho sea de paso, el color de esta preparación era bellísimo). El toro tartare, poseía el encanto de la interacción con el comensal ya que había que tomar una porción de atún y sumergirlo en alguno de los acompañamientos como wasabi, pasta nori o crema ácida. Finalmente el buri pop (atún aleta amarilla sobre una cama de arroz) fue cocinado en la mesa quedando clara la destreza del equipo de cocina de Morimoto.

Por su puesto, el sake fue la bebida predilecta de la tarde. Allí, me explicaron que Masaharu Morimoto posee una línea de sakes en la que revisa hasta el último detalle para ofrecer a sus comensales destilados de alta calidad. Éste fue el preámbulo para dar paso a los platos fuertes entre los que había que elegir uno solo, admito que no fue tarea fácil: Fish & Greens (pescado blanco con salsa yuzu-soya y vegetales); Duck, duck, duck que como su nombre lo indica es una oda al pato compuesto confit de pato, arroz frito y mole Morimoto -hay que decirlo, la consistencia recuerda más a una salsa-; y Short Rib que se leía delicioso: costilla de res con salsa de mango y espuma de papa. Me decidí por el pescado blanco. Excelente decisión. El plato era equilibrado, los vegetales estaban crujientes y la proteína jugosa, definitivamente un platillo que bien vale la pena probar. Ustedes, ¿qué hubieran ordenado?

Para terminar la gran comilona, tres postres fueron colocados en la mesa: Té matcha en texturas, Whisky on the rocks y Lemon pie. ¿El hilo conductor? El juego de texturas… Bizcochos, esponjas, helados, tierras, nubes, encerraban distintos aromas y sabores que lograban amalgamar cada uno de los postres. De todos ellos, mi favorito fue el Whisky on the rocks por su intensidad.

Sin duda alguna, le deseo al restaurante Morimoto una larga vida y la habilidad para seguir sorprendiendo al comensal con cada bocado. ¡Enhorabuena!

¿En dónde?

Mariano Escobedo 700, Anzures

Dentro del Hotel Camino Real

Web: http://www.morimotomexicocity.com

Teléfono: 5263 – 8888

Fotografías: Mary Elizalde y cortesía.

Publicidad

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.