México e Italia están unidos por mucho más que las similitudes lingüísticas, pues se trata de dos culturas profundamente ligadas a su gastronomía, la cual comparte ciertos aspectos en común, como el uso del jitomate y la figura de la cocinera tradicional como guardiana de las recetas ancestrales.
Por eso, no resulta tan extraño descubrir que la cocina italiana ha encontrado un segundo hogar en los paladares mexicanos. Desde hace varios años, se ha consolidado como una de las gastronomías favoritas en el país, con una oferta que va desde puestos callejeros de pizza (cuya relación con Italia, aunque cuestionable, es evidente) hasta algunos de los restaurantes de alta cocina más exclusivos de la ciudad.
Osterías
Uno de los conceptos más exitosos de cocina italiana en México es el de la ostería, un término que proviene de la palabra italiana ospitalità, que significa hospitalidad.
Este tipo de establecimientos se caracteriza por ofrecer un ambiente informal pero acogedor, ideal para disfrutar de la cocina tradicional. Son el lugar perfecto para deleitarse con platillos clásicos como pizza y pasta de buena calidad, sin necesidad de gastar una fortuna.
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Matti
Uno de esos restaurantes es Matti, ubicado en la colonia Juárez; una ostería que, a solo cinco meses de su apertura, ya se ha consolidado como uno de los mejores de la zona gracias a su excelente relación precio-calidad y su cálido ambiente.
La barra, situada en el centro y rodeada de cómodas mesas, destaca por la frescura de sus ingredientes y su deliciosa oferta de cócteles, tanto clásicos como creativos, como el spritz con amaretto. Además, el restaurante cuenta con una amplia carta de vinos, perfectos para acompañar cualquier platillo o disfrutar en buena compañía.
Al fondo, la cocina abierta permite ver cómo las pastas, pizzas y focaccias se preparan de manera artesanal con ingredientes de excelente calidad, como la masa madre, que tiene más tiempo de vida que el propio restaurante.
Un menú para todos
Aunque lo más habitual en un restaurante italiano es optar por pizzas y pastas, en Matti la carta ofrece una amplia variedad de opciones para todos los gustos. Entre ellas destacan la pesca del día, que varía según la temporada; los camarones a la parrilla; o la milanesa di manzo, acompañada de puré de papa, papas fritas y chimichurri.
Para cerrar con broche de oro, nada como un delicioso postre. Puedes elegir entre los cannolis con pistache, chocolate y cítricos; la pavlova con frutos rojos; o el clásico y cremoso tiramisú.
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La propuesta de Matti resalta por su atención al auténtico sabor italiano con un toque personal. Ejemplo de ello es la pizza papa-natas, con salsa blanca, mozzarella, papa confitada, cebolla, epazote y gorgonzola; la pasta bolognesa, que, a diferencia de la tradicional, se prepara con carne cocida a fuego lento; o los originales raviolis de mole negro, que fusionan dos cocinas con gran maestría.
No te pierdas la oportunidad de probar las delicias de Matti y visita su Instagram para conocer más sobre este proyecto.
