Una vez más, San Pellegrino reunió a los mejores jóvenes chefs del mundo. En esta ocasión, presenciamos un evento importante para México, ya que las semifinales de la región latinoamericana se vieron ocupadas en un 50% por chefs mexicanos, en la semifinal que se celebró en Chile los pasados 6 y 7 de junio, para escoger a un único representante de América Latina en la final de octubre de 2016 en Milán.
Una vez que todos los ganadores sean anunciados en el mes de agosto, los 20 finalistas a nivel mundial, serán asignados con un chef que los apoyará con el mejoramiento de su platillo para la gran final.
Esta vez, nos enorgullecemos de los 5 semifinalistas que representaron a México, ya que llegar a esta etapa, fue un proceso largo en donde cada uno apostó por su lugar con un platillo insignia de sus restaurantes, tal como nos contó cada uno de ellos.
Tal es el caso de Santiago Muñoz, de Fonda Mayora, quien participó con un platillo que lo remonta a la comida que le trae buenos recuerdos, los Esquites con molleja. Con su presentación, buscó emocionar al jurado a través de un tipo de comida que representa a México: la comida “callejera”.
Por otra parte, Hugo Mora del Hotel Villa Montaña en Morelia, presentó un platillo icono de su estado: Trucha arcoíris de Zitácuaro. Así, buscó abarcar la cocina del oriente de Michoacán que está un poco olvidada; preparando un plato sutil y fresco que recuerda al bosque y los sabores terrosos como el del hongo y el betabel.
La fusión de las culturas china y mexicana fue lo que el chef de Asian Bay, Luis Chiu, plasmó en su platillo de Pato lacado con salsa morry con nueces y dumpling de dátiles. Al ser la segunda vez que participa, lo hizo con gran seguridad al llevar de respaldo el reflejo de sus culturas.
Para seguir con la identidad, Daniel Nates de Maizal no fue la excepción, al presentar un Quiltamal. Platillo seleccionado por el chef, ya que considera que es reflejo de su trabajo en el restaurante, como cocinero y como persona, además de simbolizar la necesidad del hombre por la naturaleza y viceversa.
Finalmente, tuvimos la oportunidad de platicar con Fernando Hernández del restaurante Moyuelo, quien escogió un Camarón Confitado en Chalupa de Maíz Azul para ser su compañero de concurso, y el que representó una parte del estado de Puebla, saliendo de la comida conventual.
Al final, Daniel Nates fue el seleccionado para representar a México, por lo que le deseamos suerte en este prestigioso concurso y por supuesto, ¡felicidades a cada uno de los semifinalistas a nivel Latinoamérica y gracias a los 5 por enorgullecer a nuestro país y a su gastronomía!
