Por Sofía Álvarez Rodríguez
Estoy segura que muchos han escuchado hablar sobre la kombucha e incluso la han probado, pero realmente ¿cuántos de ustedes saben qué es, de donde viene y para qué sirve?
¿Qué es la kombucha?
La kombucha es un fermentado elaborado a partir de té verde o té negro. Esta fermentación se logra gracias al hongo Scoby (Symbiotic Culture of Bacteria and Yeast) dando como resultado una bebida probiótica.
Te podría interesar: Fermentos y probióticos: ¿qué son y para qué nos sirven?
Origen
El té se originó en China hace unos 5.000 años y actualmente es la segunda bebida más consumida en el país oriental, después del agua. La kombucha tiene sus orígenes en Manchuria, donde la dinastía Tsin, en el año 220 a.C., valoraba sus propiedades terapéuticas. En el año 414 d.C., el médico Kombu llevó el hongo del té a Japón y lo utilizó para tratar problemas digestivos del emperador Inkyo. Con el tiempo, la kombucha se introdujo en Rusia a través de las rutas comerciales y durante la Segunda Guerra Mundial su consumo se expandió por Europa del Este.
Elaboración
El té se enriquece con azúcar para conseguir su fermentación, lo que da lugar a la formación de una amplia gama de bacterias y levaduras que resultan benéficas para la salud y fortalecen el sistema inmunológico. Este proceso de fermentación requiere la presencia de azúcar, que se consume durante la fermentación.
Para una segunda etapa de fermentación, se incorporan frutas, las cuales otorgan a la bebida un característico sabor afrutado. Se trata de una bebida refrescante e hidratante que se disfruta mejor bien fría, y se aconseja almacenar en el refrigerador debido a su naturaleza pasteurizada.
Lee también: Fermentaciones, una fiesta de bacterias
Beneficios
La kombucha ofrece amplios beneficios para la salud, aquí te dejo algunos ejemplos
- Facilita la digestión y ayuda a regular los niveles de colesterol.
- Fortalece los huesos y articulaciones.
- Promueve la salud intestinal.
- Contiene vitaminas del grupo B, que ayudan a reducir la ansiedad, estrés y mejorar la memoria.
- Ayuda a fortalecer el sistema inmunológico.
- Estimula la regeneración celular.
¿Sabías qué?
La kombucha no solo puede ingerirse como bebida, también es muy utilizada en la elaboración de cócteles e incluso se puede aplicar para hacer salsas o algún otro platillo.
Ésta bebida tiene varios apodos, por ejemplo, en China la conocen como “el té divino” o “el té inmortal” mientras que en Japón le dicen “el té del elixir de vida”.
Tiene un sabor distintivo, puede variar desde lo ácido hasta lo dulce, dependiendo el tiempo de fermentación y los ingredientes que se utilicen para su elaboración.
Algunas personas dicen que es una combinación de sabores entre té y vinagre, con notas afrutadas y refrescantes.
Ahora que ya conoces un poco más sobre la kombucha, sus beneficios, su historia y demás, cuéntanos, ¿te animarías a darle una oportunidad e integrarla a tu dieta?
