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Moon cake: la historia de un romance astral

Angel Venegas
Angel Venegas
Gastrónomo y periodista gastronómico apasionado por la fotografía, historia y comida. Mantiene conexión con la cocina para preservar su sazón y comparte su pasión con otros. Dispuesto a ofrecer datos curiosos, referencias históricas y rarezas de la vida.

Hace mucho tiempo, tanto que no puede ser contado, habitaba la tierra una pareja que servía a los dioses de China. Houyi y Chang’e, dos enamorados son recordados cada quinceavo día del octavo mes del calendario lunar, con un moon cake.

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Durante aquellos días, la tierra no era iluminada por un solo sol, sino por diez de ellos que se iban turnando para generar los días y las noches. Sin embargo, cuenta la leyenda que en uno de estos ciclos los diez soles salieron por el firmamento y los dioses alarmados recurrieron a Houyi, un diestro arquero del imperio, para que derribara nueve de los astros y así restablecer el orden de las cosas.

Moon cake

Como recompensa por sus acciones se le otorgó un elixir de la inmortalidad, regalo que él decidió ocultar y no utilizar, pues lo separaría de su esposa Chang’e, sirvienta del palacio de los dioses, las deidades comprendieron el acto y permitieron que el regalo permaneciera oculto.

Los años pasaron y nuestro héroe fue nombrado instructor en la academia de arqueros del palacio, así que la paz reinó en toda China. Pero la calma no duraría por siempre y la maestría de Houyi sería requerida una vez más.

Moon cake

Esta nueva encomienda lo obligaría a abandonar su hogar y con ello, dejar a la merced de cualquiera a Chang’e y al elixir obsequiado por los dioses. Tras la partida del arquero, se hizo notoria la codicia que había nacido en los corazones de algunos de sus estudiantes.

Durante el asalto, lograron acorralar a Chang’e, quien en un último acto de desesperación ingirió la poción. Al haber terminado la última gota la mujer empezó su ascenso a la tierra de los dioses. Alarmada por no volver a ver a su amado, le pidió a la luna que la dejara quedarse en su superficie esperando que él llegara con ella.

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Moon cake

Al regreso de Houyi y enterarse de lo sucedido imploró a los dioses que le entregaran otra pócima para alcanzar a Chang’e, sin embargo, la respuesta fue negativa  ya que el elixir de la inmortalidad se había agotado. Conmovidos y como pago por sus servicios, le ofrecieron un palacio en el sol para que así pudiera encontrarse con su esposa cuando los dos astros se alinearan.

Así es como cada año, en el quinceavo día del octavo mes del calendario lunar, Houyi y Chang’e pueden encontrarse una vez más, para consumar su amor inmortal. En honor a estos dos personajes nació uno de los protagonistas del festival de medio otoño, el moon cake, un postre salado que simboliza la historia de los enamorados.

Moon cake

Moon Cake

Los elementos que componen este pastelillo son tres: corteza, relleno y una yema de huevo de pato. La cubierta de masa puede prepararse de tres maneras dependiendo de la región de la que provenga la receta; la primera es la más popular alrededor del mundo, la cantonesa, se elabora mezclando almíbar, harina y aceite. Al hornearse queda una masa densa de color rojizo y de brillo lustroso.

El segundo estilo de masa es la hojaldrada, característicos de la zona de Suzhou, se elaboran alternando capas de masa aceitosa con harina salteada en aceite, obteniendo una textura similar al hojaldre. La tercera de estas variedades es la tierna, que se hace con una mezcla de azúcar, aceite, harina y agua, con una textura similar a la de la pasta brisa.

Moon cake

En cuanto a los rellenos suelen ser diversos y principalmente dependen del gusto de quien elabore el pastel, los más comunes son de semilla de loto, frijol dulce, taro, durián y cinco semillas. Acompañando este relleno se integra la yema del huevo de pato que se prepara mediante una salazón, que por lo regular tarda un mes; este elemento brinda destellos salados al postre.

En cuanto a la decoración encontramos los tradicionales y los modernos, si se apegan a los orígenes el sello con el que se marca la cubierta, cuenta con grabados referentes a la luna o a Chang’e, mientras que los contemporáneos sólo mencionan el sabor del relleno.

Moon cake

La manera de comerlo es compartiéndolo con un ser especial, ya sea un familiar cercano o con la pareja, simbolizando el amor de Houyi y Chang’e. En cuanto a la bebida lo recomendable es armonizarlo con una taza de té negro u Oolong de alta oxidación.

Este dulce de oriente se puede encontrar en el restaurante Asian Bay, los primeros días de octubre, aunque se pueden hacer encargos desde un par de meses antes, por el tiempo de elaboración.

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