No importa donde hayas nacido, cuántos años tengas ni tu poder adquisitivo, estoy seguro de que has comido pizza, por lo menos una vez. 

Y es que este es uno de los platos más populares del mundo, y aunque cada país tiene sus propias versiones, la pizza no deja de ser una de las opciones más seguras al momento de pedir comida a domicilio.

Y es que resulta una opción súper práctica para salir del apuro cuando no tienes tiempo o ganas de cocinar, porque basta con levantar el teléfono u abrir tu aplicación de delivery favorita y en tan solo unos minutos tendrás tu pizza calentita en la puerta de tu casa.

El único problema es que, por ser una comida rápida, la pizza suele ser poco saludable, de sabores simples y una comida impersonal -es decir, que en todo el proceso tu única interacción es con el repartidor, y no dura más de un par de minutos-… ¿O no?

Foto de Brett Jordan en Pexels

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En realidad la pizza no tiene por que tener estas características; de hecho, una buena pizza es una comida muy balanceada, y los pizzeros tradicionales hacen un gran esfuerzo por ofrecer la mejor gama de sabores para el comensal, utilizando ingredientes de alta calidad, y en muchos casos, procuran también un trato directo con los comensales.

Los ingredientes

Aunque estamos acostumbrados a las clásicas como la de pepperoni y la hawaiana, en realidad éstas no son las tradicionales. En Italia, las pizzas más tradicionales son la marinara, que literalmente solo lleva la masa y una salsa de tomate condimentada con ajo y orégano -ni siquiera lleva queso- y la margarita, que además de la salsa tiene queso mozzarella en rebanadas y albahaca.

Pero eso no significa que no deba prepararse pizza con otros ingredientes, sino que estas dos pizzas sientan las bases para un montón de variaciones interesantes a las que se les puede agregar diferentes tipos de queso como parmesano, provolone, azul o queso asiago, así como vegetales y diferentes proteínas que van más allá del pepperoni y el jamón.

Además, actualmente existen muchos tipos de masa que hacen que la base de la pizza, es decir, el pan, pueda desembocar en una experiencia diferente aunque los toppings sean los mismos. Las hay delgadas y crujientes, gruesas y esponjosas e incluso hay quienes utilizan pasta hojaldrada, aunque esto no es tan común. Pero en lo personal, no hay mejor base para pizza que la que se hace con masa madre, pues esta tiene una consistencia única y un sabor delicioso que aporta un perfil completamente diferente al resultado final.

El proceso

Hoy en día, las grandes pizzerías utilizan un proceso muy estandarizado para que todas las pizzas salgan lo más parecido posible y en el menor tiempo, con rodillos y cortadores automáticos, hornos industriales y todo ese tipo de artilugios que permiten una producción eficiente.

Nik Owens en Unsplash

Pero en los recintos más tradicionales -y, a mi parecer, más ricos- no tienen este tipo de equipo, no solo porque es caro, sino porque le quita el toque personal. Por eso muchos pizzeros prefieren amasar a mano y cocinar la pizza en horno rústico o de barro, que además de ser un proceso más artesanal, enriquece al platillo con sabores más complejos.

Fabiana´s pizzería

El concepto de las pizzas como comida rápida está lejos de extinguirse, y con buena razón, porque a pesar de todo son una buena solución a los momentos de apuro, y para ser honesto, no es nada raro que se me antoje pedir una solo por el placer.

Pero también es bueno que cada vez haya más opciones de “pizza lenta”, donde ofrecen algunas de las pizzas más deliciosas que he probado. Un claro ejemplo de esto es Fabiana´s, una pizzería ubicada en Virgilio, Oscar Wilde 8, en  Polanco, donde la pasión por la buena pizza es comprobable en cada bocado.

El negocio tuvo sus orígenes durante la pandemia, cuando Fabián Acuña, copropietario del lugar -junto con su madre, Lucy- se vio obligado a buscar una alternativa temporal para sobrevivir, preparando pizzas de masa madre desde su casa, pero el éxito fue tan grande que decidió abrir su propio local cuando tuvo la posibilidad.

Dentro del extraordinario menú de Fabiana´s pizzería puedes encontrar dos tipos de pizza: de salsa de tomate y de salsa blanca. Entre las primeras, destaca la «P.I.M.P«, que aunque es una pizza de pepperoni, la adición de jalapeños y miel le da un toque único que vale la pena probar. 

Alcachofa a la plancha

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Del segundo grupo, las de salsa blanca, no puedes perderte la «tartufata«, con mozzarella, tartufato -una especie de salsa preparada con trufa negra- y parmesano, y si lo tuyo es el queso, la “cuatro encinos” está hecha para ti, pues lleva queso de montaña Mazahuatlaca de trufa, asiago, ricotta y mozzarella.

Además, porque no todo en la vida es pizza, puedes pedir alguna entrada, como la alcachofa a la plancha con vinagreta de orégano, pero asegúrate de comértela antes de que se enfríe. Y de postre, unos profiteroles rellenos de helado de vainilla

Si se te antojó tanto como a mí, no dudes en consultar su perfil de Instagram para conocer sus nuevos platillos y visita la pizzería en Polanco para una experiencia inolvidable. La pizza no volverá a saberte igual.

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