Es verdad que la pizza se ha posicionado como uno de los platillos favoritos del buen comer, ya sea para compartir en familia, en una reunión con los amigos o hasta vestida de gala para una cena romántica, la pizza es uno de los platos predilectos y más versátiles del mercado.
Durante los últimos años tener una dieta y estilo de vida más saludable ha pasado de ser una moda a una necesidad. No sólo por las grandes complicaciones de salud que hemos enfrentado como sociedad a nivel mundial por la pandemia desde hace ya tres años sino por el consumo frenético, y por ende, el desabasto de múltiples productos la tierra y el desarrollo de enfermedades y alergias que nos han exigido un cambio en la forma en la que consumimos y vemos los alimentos. Por ello quiero contarte sobre una pizzería ubicada en el local 145 sobre la calle Euler en Polanco: Pizza Grata, que ha llegado para complacernos con este gran platillo de una forma saludable, ligera y sana.
¿La pizza es comida chatarra? Modifiquemos la perspectiva
Pizza Grata se distingue por ser una pizza saludable, uno de los objetivos principales de su creador: Alfredo Llantada, quien comenta que durante la pandemia ordenó varias pizzas comerciales y con ello confirmó que no era la mejor alimentación para sus hijos y su familia, también se hartó de sentirse indigesto al terminar. Fue a partir de esta ruptura que comienza la idea de llevar a cabo esta propuesta. Una pizza con ingredientes de buena calidad, mucho sabor, accesible y lo más importante: hecha con masa madre.
¿Por qué la masa madre? Por la fácil digestión. Las pizzas comerciales te hacen sentir indigesto por el tipo de ingredientes que utilizan. Por lo contrario, una buena y bien lograda pizza de masa madre, te ayudará a optimizar al máximo la digeribilidad del gluten desde su proceso. “El secreto de la pizza está en la masa.”
“Cuando una Pizza está elaborada con masa madre tiene una cualidad fundamental que la diferencia del resto: tiene personalidad, características propias, un sabor particular y un componente emocional que no encontraremos jamás en un producto, sea el que sea, de fabricación industrial”
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Pero… ¿qué es la masa madre?
Si no estás familiarizado con este término, se trata de una masa creada por unos microorganismos vivos que se encargan de la fermentación del pan llamadas levaduras. Es un proceso que se da de forma natural, ya que no se le agrega levadura química. Las levaduras que se utilizan son cultivos orgánicos de los mismos alimentos, generando una masa que fermenta de manera completamente natural, un producto que se podría decir es un ser vivo. Las levaduras se reproducen alimentándose de sólo dos ingredientes principales: agua y harina. Esto es lo que hace que las pizzas de Pizza Grata sean realmente únicas.
Al menos 24 horas de fermentación para elaborar la masa es lo que ayuda a hacer un tipo de “pre-digestión” antes de consumirse. La composición de la masa madre es tan compleja que alberga muchos nutrientes. Entre ellos se encuentran las vitaminas B1 a B6, B12, folato, tiamina, niacina, riboflavina, vitamina E, hierro, magnesio, calcio, fósforo, zinc y potasio. Además, también tiene un increíble balance de proteínas y ácidos grasos. ¿Así o más saludable?
Un concepto que parte de la gratitud
Alfredo Llantada comenzó este proyecto con un horno de piedra que construyó primero en su casa para realizar pruebas. Se trata de un horno de ladrillos hecho con mortero, que es como una mezcla de cemento, concha aislante y mosaico veneciano, luego replicó este mismo en formato más grande para el local.
Pizza Grata parte de la gratitud hacia la madre tierra, los ingredientes, el cuerpo y la mente sana. No olvidemos que el alimento es el motor espiritual e intelectual del ser humano. Pizza Grata tiene una personalidad nostálgica, al recordar que sentarse a la mesa es comer sin prisas, compartir y hacer esa conexión con nuestros alimentos. Simplemente disfrutar el momento y agradecer poder estar ahí, presente.
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El estilo favorito de pizza: la napolitana
Pizza Grata es una pizza de estilo napolitana con masa delgada y bordes anchos, pero no llenos de migajón. Bordes anchos creados por alveolos que resultan de hornear la masa madre con una fermentación de al menos 24 horas. Así, el producto final presenta una base de masa ultra delgada y suave que casi se deshace al contacto con la saliva.
Una pizza que pide tratarse con cariño, cortando pedazo por pedazo con unas tijeras para tomar las rebanadas de los bordes hacia el centro, meter la orilla y pa’dentro. Como un taco. Por cierto, un tip para identificar una auténtica pizza napolitana es que al levantar un pedazo la punta cuelgue como una lengua.
Este lugar también se distingue por sus ingredientes artesanales. Al instante te darás cuenta que los componentes de cada pizza, ensalada o pasta no son comprados en algún súper o central de abastos, pues el cuidado a cada detalle es algo que distingue a Alfredo. Podrás encontrar que así como la masa madre es alimentada con harina orgánica integral, el guanciale (la papada de cerdo) y el pork belly son elaborados y madurados en casa.
¿Qué comer?
Te recomiendo que no te vayas sin probar una ensalada, una pasta, la pizza de tu elección y al menos un trago. Si eres un carnívoro ferviente como yo, la pizza Meat Lover no te decepcionará. Con una salsa de tomate casera, mozzarella, pepperoni, salchicha artesanal y boloñesa también hecha en casa es un absoluto MUST. La boloñesa tiene ese toque familiar que te hace sentir como una tarde de verano perfectamente cálida.
También tienen las especiales, de rib eye, salmón, burrata o la “Estrella de la casa” (así se llama la pizza porque literalmente tiene forma de estrella), con base de salsa blanca, mozzarella, aguacate, limón eureka y un dip de salsa arrabiata. Lo mejor de esta pizza, aparte de la forma, es su combinación de sabores. Viene acompañada de limón amarillo para que le exprimas al gusto. ¿Limón amarillo y pizza? Así es, y nos encantó. Si eres fan de las pizzas ligeras pero con gran sabor, esta es la elección. Viene con un top de arúgula fresca. Sin duda me quedé con ganas de regresar a probar la pizza de gorgonzola, pera caramelizada e higo.
En la sección de pastas encontrarás tortellini y ravioli elaborados con pasta hecha en casa desde cero. Con rellenos como queso ricotta y espinaca que puedes pedir con diferentes salsas. Para seguir agasajando al paladar con texturas, te aconsejo pedir una salsa a base de mantequilla, queso, limón eureka y perejil o nuez troceada y hojas de salvia; top de Grana Padano rallado para culminar el manjar.
El dulce final
Aquí el postre es ciertamente obligatorio. Tienen una selección de postres clásicos italianos pero con su respectivo twist. Como el tiramisú de matcha con pistaches o la panna cotta casera que en lugar de frutos rojos, se fueron por un camino más tropical y la acompañan con kiwi y piña.
Una mousse de chocolate semi amargo con reducción de vino tinto, frutos rojos y una crema batida de aceite de oliva fue mi elección. Sin duda, un postre que tendrás que saborear paso a paso y no querrás encontrar el final. Si eres de aquellos que les gusta probar cosas exóticas y raras, pide que te lleven con tu mousse aceitunas negras kalamata. Esta recomendación me recordó la escena de Ratatouille (Disney Pixar, 2007) y la explosión de sabores. Una combinación a la que no hay que buscarle explicación, simplemente hay que disfrutar.
Los drinks
Como buen lugar de pizzas italiano, tienen el vino de la casa a 75 pesos. Un vino cumplidor que puedes pedir como cuartino (una jarrita de 250 ml.), ideal para maridar tus alimentos. También cuentan con una lista selectiva de vinos mexicanos, españoles e italianos.
Te invito a que pruebes su coctelería, no te vas a arrepentir. Un negroni sbagliato, que es una versión italiana de este coctel clásico que terminan con vino espumoso, un clásico con mucho carácter pero refrescante. O el Jamaica Spritz que lleva jarabe de romero, Campari y concentrado natural de jamaica con su top de espumoso.
Pizza Grata reivindica el concepto de la pizza en la ciudad, un lugar con ambiente relajado en donde puedes ir un domingo familiar o un viernes por la noche a echar el trago. Si no quieres salir de casa y prefieres seguir en la comodidad de tu hogar puedes pedirla a domicilio, sentarte a ver una película y abrir un vino Albariño para acompañar tu pizza (yo hice esto con la pizza Meat Lover y fue un agasajo).
¿Dónde?
Euler 145-local 155, Polanco, Polanco V Secc, Miguel Hidalgo, 11560 Ciudad de México, CDMX
HORARIOS:
Lunes a Miércoles de 13:00 – 22:30
Jueves a Sábado de 13:00 – 23:30
Domingo de 13:00 – 18:00
IG- @pizzagrata
FB- @pizzagrata
