“No existe maridaje perfecto, el vino es simplemente un elemento más de la mesa” nos comenta el enólogo, de la Bodega Mariatinto, Humberto Falcón al querer explicar la combinación que se genera en nuestra boca al probar un rico platillo y un buen vino.
Mariatinto y el restaurante Anastasia Bistro&Lounge nos ofreció una cena espectacular con diferentes vinos que concordaron con los platillos. Comenzando con dos entradas, tártara de camarón con mango y un carpaccio de róbalo, uniéndolo con un ligero y delicioso Blanco Mariatinto que se caracteriza por sus sabores cítricos y tropicales que se acompañan bien con alimentos en donde resaltan los tonos ácidos y picantes.
Continuando con platillos fuertes como la tapa rosada de salmón con naranja y jengibre, y callo de hacha con porccini, que fueron de la mano con un vino rosado Madame Babete seco y tropical; después el huanzontle en nogada y una ajada de pescado al vapor con un vino 100% de Baja California que tiene un sabor y color fuerte: Tinto Mariatinto, el cual resulta un poco difícil de maridar por la gran forma y cuerpo que éste tiene, pero esta vez tanto el chef como el enólogo nos sorprendieron.
Al finalizar, nos ofrecieron un delicioso solomillo de cordero relleno de pesto en salsa clara-obscuro el cual generó una gran unión con el Tinto Sang Blue 2010, criado en barrica de roble francés, creando una perfecta armonía.
Mariatinto es una buena opción para jugar con los platillos y lograr nuestro “maridaje perfecto” o casi perfecto.
Por: Samantha Acuña
