La historia del Día del Padre, surge el 19 de junio de 1909, en Estados Unidos cuando una mujer llamada Sonora Smart Dodd quiso homenajear a su padre, Henry Jackson Smart. Este veterano de la guerra civil se convirtió en viudo cuando su esposa (la madre de Sonora Smart Dodd) murió en el parto de su sexto hijo. Fue en una granja rural en el estado de Washington donde Henry Jackson se hizo cargo de la educación de seis niños. Sonora Smart se dio cuenta de que su papá había sido todo un ejemplo a seguir y propuso la fecha del nacimiento de su padre, el 19 de junio, para celebrar el Día del Padre.
La idea de instituir un Día del Padre fue acogida con entusiasmo por muchas personas en diversos condados y ciudades, pero ocurrió hasta 1924, cuando el presidente Calvin Coolidge apoyó la idea de establecer esta conmemoración. En 1966, el presidente Lyndon B. Johnson firmó una proclamación que declaraba el tercer domingo de junio como Día del Padre en Estados Unidos y actualmente se festeja en gran parte del contienente americano.
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Una sugerencia ideal para regalar a papá en su día es el vino.
Al obsequiar una botella o una caja de vino, demostramos nuestro deseo de compartir y dedicar más tiempo a estar con nuestro padre o con nuestro abuelo, conversar sobre cualquier cosa y disfrutar de su compañía y, por supuesto, del vino.
Por otra parte, sugerimos regalar tiempo y viajes. Una botella de vino es el resultado de tiempo, desde la edad del viñedo, la vendimia de las uvas, su elaboración y posible crianza hasta que servimos el vino en la copa. Si bien, cada botella transmite las características de la tierra, los viñedos y el esfuerzo de muchas personas, es un obsequio pleno de sentimientos y emociones que puedes enriquecer si visitas el viñedo. Para los más viajeros sugiero una experiencia enoturística. Un viaje al viñedo y a la bodega para disfrutar de una cata y de todos los atractivos del campo. Cualquier temporada es muy buena, pero en verano, especialmente en agosto, celebramos las Fiestas de la Vendimia y es una ocasión maravillosa para divertirse y seguir enamorándose del vino.
Por cierto, al regalarle a papá una botella de vino, le estamos obsequiando salud. Hoy las investigaciones demuestran que, bebiendo responsablemente y con moderación, el vino nos ayuda a proteger nuestra salud. Su gran cantidad de polifenoles, entre ellos los taninos son un elemento antioxidante muy importante para mantener la piel joven, así como para nuestro organismo, porque todos nuestros órganos necesitan ayuda para mantenerse jóvenes.
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Finalmente recuerda que el mejor vino, es el que se comparte y el que empieza y acaba con una sonrisa.
¡Feliz Día del Padre!