La harina de trigo tiene múltiples aplicaciones en cocina, sin embargo por tener partículas muy pequeñas con frecuencia resulta un problema para limpiar todo tipo de superficies… incluso el techo. Además, se ha comprobado que el respirar estas partículas finas de harina de manera constante, tal como lo hace el personal de panadería, ocasiona problemas en el sistema respiratorio que se clasifican como riesgos laborales y tienen costos asociados.
La empresa alemana GoodMills ofrece una solución con las harinas Low-Dust, las cuales crean un 85% menos polvo que las harinas regulares y tienen un efecto antiestático. Elaborada a través de un proceso hidrotérmico, ésta línea de productos se hizo acreedora al Premio Alemán de Salud e Higiene 2015. Además, la masa elaborada con estas harinas no se adhiere a las charolas de hornear. Las marcas disponibles a nivel comercial para esta línea son: Ping-Pong 500, Tip-Top Ultra Clean y la Tip-Top Ultra Clean Spezial. Más información en: goodmillsinnovation.com/
Fuente:
INGREDIENTS NEWS. (2016). Food & Drink Technology, 15(6), 14.
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