Siempre es fácil relacionar la palabra “celebración” con comida y tal vez es el caso de la época de Cuaresma y Semana Santa, donde los fieles católicos y cristianos, así como los que se encuentran influenciados por las culturas de éstos, siguen una serie de tradiciones que se cumplen a lo largo de estos días. Tal es el caso de México, en varios aspectos, pero específicamente les platicaré de las tradiciones alimentarias a través de cinco de los platillos más tradicionales de estas fechas.
Como bien sabemos, el consumo de carne está restringido en Cuaresma. Para empezar, una de las sopas que se consumen son los Nopales Navegantes, que se preparan con caldo, chile poblano, epazote y cebolla. Es importante mencionar que mucha gente les agrega clara de huevo.
Otro platillo que normalmente adjudicamos a la Navidad y que también se consume por razones religiosas durante estas fechas son los Romeritos, preparados con mole, papa, camarones y en algunos casos con nopales.
Seguimos con el mole, que también se utiliza para preparar las deliciosas Tortitas de camarón, que prácticamente constan de los mismos ingredientes que los romeritos, pero únicamente se presentan de manera diferente.
El Bacalao, es otra preparación digna de esta Cuaresma Tradicionalmente cocinado con jugo de jitomate, chiles güeros y aceitunas.
Para terminar, como un buen final tiene que ser dulce, un postre típico en estos días es la Capirotada, mezcla de pan, canela, queso, piloncillo y pasas, principalmente. Éste cuenta con una gran historia y además, su existencia se debe a una serie de razones y causas culturales, económicas y políticas; pero esa es otra historia que ya les contaremos. Por el momento, ¡hay que disfrutar los sabores de Cuaresma!
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